Seca los filetes de emperador con papel de cocina y sazónalos por ambos lados con sal y pimienta negra.
Calienta una sartén amplia de fondo grueso a fuego medio-alto. Añade el aceite de oliva y caliéntalo hasta que empiece a brillar.
Coloca los filetes en la sartén sin amontonarlos y dóralos 3-4 minutos por cada lado, hasta que estén dorados y el interior deje de verse transparente (la temperatura interna debe alcanzar 63 °C).
Incorpora el ajo picado y las rodajas de limón a la sartén. Cocina durante 1 minuto, hasta que el ajo desprenda su aroma y las rodajas de limón se caramelicen ligeramente.
Exprime el jugo del medio limón restante sobre los filetes. Retira el pescado de la sartén y sírvelo en los platos.
Espolvorea el perejil picado por encima del emperador y sirve inmediatamente.